miércoles, 6 de octubre de 2010

CUARENTA Y ...PICO PRIMAVERAS EN OTOÑO / RELATOS


------------------------------------------------------------------------------------------------
Este texto lo escribí en esa época en que te planteas hasta por qué te pican los mosquitos solo a tí.
Dedicado a "40añera", una blogera en la mejor etapa de su vida
---------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------



Buenas tardes, primero me gustaría presentarme:


Soy una mujer de cuarenta y… pico de años y…..pero seguiré con mi relato que es lo que les interesa.
Estoy casi segura que para las mujeres de mi edad la definición del otoño no tiene nada que ver con la de una persona más joven.


El periodo comprendido entre los 40 y los 60 años son cruciales; al principio nos creemos demasiado jóvenes para pensar que estamos entrando en el otoño de nuestra vida, pero cuando vas llegando a los cincuenta como … otras mujeres, la mente va dándole vueltas a la cabeza y contando para tus adentro; qué ha sido lo más positivo en tu vida, qué sueños te hubiera gustado realizar y no lo has conseguido, por qué con diecisiete años querías tener siete hijos y cuando llevabas uno te planteaste que serían mejor sólo dos, por qué a los veinticinco tu marido es el más guapo del mundo y ahora te metes en el televisor cuando ves a George Clooney (por ejemplo), o por qué cuando nace tu primer nieto te lo quieres comer, y prometes y juras a tus hijos que mientras ellos trabajan tú los cuidarás, y cuando el niño va por los cinco años, estás deseando que llegue el sábado para que “el dichoso” le dé un ratito la lata a sus padres.



Pero bueno no todo es así. También pensamos en la corta vida que nos queda si miramos hacia atrás, y en lo larga que parece si recordamos lo de: ¡Hasta que la muerte nos separe! O bien, en cuándo teníamos veinte años y nuestro novio nos decía: ¡estás guapa hasta sin pintar! y ahora nuestros maridos dicen: ¡más vale que te pintes para salir, porque hija tienes una cara!
Cómo habrán imaginado todo esto lo cuento con humor, porque la mayoría de las mujeres tenemos que tomárnoslo así. Llegados a este punto de nuestra vida son muchas las cosas que verdaderamente nos planteamos y si le damos respuesta a todo nos volveríamos un poco locas.


Ahora les voy a contar la parte bonita de este otoño.


Cuando nace tu primer hijo, nunca puedes imaginar el amor que le tendrás al cabo de los años, porque el amor de una madre es como el sabor del buen vino, que a medida que pasa el tiempo va aumentando, y los nietos es verdad que cansan, pero porque nos cogen a una edad en la que las fuerzas cómo que nos van abandonando poco a poco, pero lo cierto es que estamos deseando que llegue el lunes para volverlos a ver y que seríamos capaces de dar nuestra vida por ellos al igual que por nuestros hijos.



También es bonita esta fase de nuestra vida, porque disponemos de ese tiempo tan deseado años atrás para nosotras mismas, leer, escribir, ir al cine, pasear de la mano junto a ese hombre para el que ahora tienes que maquillarte pero que sin él no vives; es positivo hasta el estar enferma, porque cuando ocurría y los niños eran pequeños, entre la casa y su cuidado no tenías tiempo de descansar, ahora por lo menos si te encuentras mal puedes sentarte o irte a la cama.




Y por último, si les ocurre como a mí que ven cómo, con la caída de esa hoja muchos de esos sueños de quinceañera aunque un poco tarde, se van realizando, comprenderán que el otoño de los jóvenes es distinto, pero no mejor al de los mayores.

                                        *************************


Escrito por: Carmen F.S.
(Miembro del Club de Letras de la U.C.A. Y de la Revista Literaria Spéculum)

Imágenes: extraídas de Internet





5 comentarios:

  1. Sabes, también deambulo por ésta bella etapa, y para mi ha significado explorar, indagar, acometer con energía, una aventura que tenía postergada por motivos muy puntuales. Todavía tengo un pequeño de nueve años, que interactúa con los mayores de una forma maravillosa, y eso me ha permitido volcarme en lo que siempre he amado: la pintura y la escritura...Cruzar la barrera mental de los cuarenta, es sentir que puedes ser más intensa y válida en cada actividad que se realiza. Siento que es un otoño con dejos y pinceladas muy primaverales, con gusto a frutillas, y con sonidos de voces que cada día amo un poco más.
    Una pregunta, ¿cómo te sigo?, observo que el gadget seguidores no está instalado...

    ResponderEliminar
  2. Taty, no sé que ha ocurrido, tenía algunos seguidores ya publicados y de buenas a primeras se han borrado y no sé como volverlo a instalar, lo sabes tu?
    Gracias
    Carmen

    ResponderEliminar
  3. Gracias Carmen por dedicarme esta entrada me siento muy hinrada.
    Con respecto a la edad yo sigo sin creerme que este en los 44 ya, no tengo hijos por desgracia y a partir de una enfermedad de mi chico que lo tuvo jugando a las cartas con S.Pedro mientras y no dormia velandolo sus cartas durante mucho tiempo he perdido na necesidad de mirar al pasado para hacer balance y al futuro para hacer proyectos, ahora vivo cada día pensando que es una suerta estar aqui y que quiero seguir estando ya sea, gorda o flaca, vieja y con arrugas o mejorada como un buen vino. Me quiero y me quieren y me gusta que lleguen los años por que eso significa que estoy viva.
    Repito gracias por tenerme presente.
    Besotes

    ResponderEliminar
  4. Pasaba por aquí y..........me quedo a aprender. Aun estoy lejos de esa etapa pero, también me llegará ¿verdad?. Ya tienes un seguidor más. Solo por el hecho de la sensibilidad que despiertas vale la pena. Un saludo.

    Si te apetece conocerme puedes visitar mi blog. Intento transmitir sentimientos a través de relatos-protesta. Te espero.

    ResponderEliminar
  5. Me ha encantado Carmen,
    es tan cierto lo que cuentas yo estoy en los 42 rozando los 43 y bueno aun no he tenido nietos pero si hijos y es como lo cuentas, yo estoy encantada de tener esta edad, jamas me he sentido tan autentica y completa a pesar de la salud que flaquea pero eso sabemos que no es por la edad,
    así que vivan los años que estén por llegar, bienvenido otoño.
    un besazo carmen

    ResponderEliminar